Los Grassi

Causa Grassi
Derechos Humanos
14.10.2008
Por Enrique Stola. Médico psiquiatra
 
En el día de ayer, 14 de octubre de 2008, tuve que testificar ante el Tribunal Oral Nº 1 de Morón, a cargo del juicio, integrado por su presidente, Luis María Andueza, y los vocales Mario Daniel Gómez y Jorge Eduardo Carrera. Ciudad de Morón, Provincia de Buenos Aires. Argentina
Debo destacar que durante todas las horas en las que estuve declarando el Tribunal tuvo una actitud sumamente respetuosa y correcta, así como los abogados de la defensa del cura Grassi, los abogados de la querella y el Fiscalía.
Lo que sigue fue mi posición ante lo que considero una re-victimizació n de los jóvenes denunciantes, con-semiplena- prueba víctimas del cura Julio César Grassi.
El desarrollo de este punto, el que se refiere a la re-victimizació n, se concretó casi al final de la larga jornada. Lo pude hacer con la atenta escucha del tribunal y de los y las presentes. En este escrito que comparto mis afirmaciones están condensadas, dejando de lado los ejemplos que di y las respuestas a preguntas que mi posición dio lugar. Debo aclarar que lo que manifiesto aquí sobre juicio público- juicio privado, no fue expresado en la declaración. Se me olvidó. Mil disculpas.

Los derechos humanos de los jóvenes denunciantes:

Fui terapeuta de dos de los jóvenes que son las con-semiplena- prueba víctimas del cura Julio César Grassi. Ambos ratificaron su acusación durante este juicio oral.
Como médico psiquiatra y testigo en el juicio que se lleva a cabo contra este cura imputado de abuso sexual y corrupción de menores, me siento moralmente obligado a manifestar lo siguiente:
Luego de mi experiencia con el Poder Judicial en el "caso Grassi" y de luchar contra un persistente maltrato institucional hacia mis pacientes, no puedo dejar de señalar la reiteración de estas conductas. Aún así, debo rescatar que en este país muchos de los funcionarios y funcionarias judiciales se ajustan a derecho y eso, ante tanta mediocridad y negligencia, resulta un gran alivio.
Reivindicando mi pleno ejercicio de la ciudadanía digo:
Los señores jueces del Tribunal Nº 1 de Morón, Provincia de Buenos Aires, que están juzgando al cura Julio César Grassi no posen conocimientos sobre la temática de abuso sexual infantil (ASI), abusadores y víctimas. Esto es un hecho preocupante que propicia en mí una gran desconfianza sobre su imparcialidad, pero paradójicamente esto mismo constituye un motivo para otorgarle crédito a este tribunal.
¿Por qué digo que no poseen conocimientos del tema y les estoy otorgando crédito?
  • Porque la decisión de no hacer público el juicio tiene como beneficiario único al imputado cura Grassi. Esto lo he denunciado antes de comenzar el juicio y se ha ido corroborando día a día en el transcurso del mismo. El acusado de abuso sexual tiene presencia y voz activa en los medios de comunicación masiva mientras las con-semiplena- prueba víctimas NO. Si el juicio hubiera sido público, el testimonio de los peritos y de los testigos aportados por la acusación hubieran sido la voz de las con-semiplena- prueba víctimas.
  • Afirmo como profesional que este tribunal no posee conocimientos sobre las características del delito de abuso sexual infantil porque sólo desde la ignorancia se pudo hacer declarar a los tres jóvenes en presencia del imputado de abuso sexual.
  • Estos jóvenes, que cuando niños vivían en la Fundación "Felices los Niños", crecieron bajo el poder de su cuidador y ahora acusado de abuso sexual infantil y corrupción, el cura Grassi. Los jóvenes denunciantes han revivido inevitablemente durante el juicio el miedo a esta figura y debieron hablar bajo su mirada (¡!) Esto recibe el nombre de re-victimizació n y son plenamente responsables de ello todos los integrantes del Tribunal Nº 1.
  • Doy crédito a que este Tribunal Nº 1 es imparcial señalando que están siendo jueces en donde hay un probable delito, corrupción de menores y abuso sexual, temática que desconocen. Porque si fuera el caso que estos señores realmente tuvieran conocimiento del tema: abuso sexual infantil; entonces debería concluir en que las acciones realizadas tales como hacer declarar a los jóvenes a escasos tres metros del imputado y en contacto visual directo con el mismo, no es producto de la ignorancia sobre el tema sino que fue concretado con un propósito claro de paralizar y/o quebrar a las con-semiplena- prueba víctimas y beneficiar con ello al imputado.
  • Ninguna supuesta víctima de violencia de género, violencia sexual o abuso sexual infantil debe volver a pasar en Argentina por esta siniestra re-victimizació n que han sufrido los tres denunciantes. Debe legislarse para que esto no suceda nunca más en un tribunal de nuestro país.
Buenos Aires, 15 de octubre de 2008
En estos momentos el acusado de abuso sexual y corrupción cura Grassi, está diciendo entre otras cosas que soy un "mentiroso" y un "sociólogo del rumor".
Ya en su momento en una carta documento le había expresado al acusado que solo el número de causa nos unía y que la Etica nos separaba.
Hoy le recuerdo al cura Grassi que él es el acusado de abuso sexual y corrupción de menores.. Y yo solo un terapeuta testigo que no tiene que estar demostrando nada a la sociedad

Enrique Stola
Rodríguez Peña 582, Piso 2º
Buenos Aires, Argentina (1020)
"El silencio es complicidad" José Adán Castelar, poeta de Honduras. América Central

Cuando el poder da impunidad para los abusos de todo tipo

Familia Grassi


Vamos a ejemplificar con el caso “familia Grassi” los fenómenos de abuso sexual y estafa perpetrador de una forma escandalosa bajo el manto de la seguridad que da el poder y la fama. Algo les falló a los dos hermanos de esta familia y fueron descubiertos y acusados por esos delitos.
Seres como estos abundan, los últimos gobiernos (en Argentina especialmente el proceso y la década del 90) han dado rienda suelta para la contaminación de esta plaga. Por ello hay que saber de que se trata.
Informar sobre las características de personalidad de estos entes y trabajar sobre los recursos personales para defenderse ellos son objetivos de la educación para la salud .

Tomamos este ejemplo de actualidad argentina para plantear algunas reflexiones sobre la comunicación y características personales en el marco de la relación que se establece entre abusador y abusado. Nos referimos a abuso en su concepción amplia: físico, psíquico, emocional, sexual y/o social.
Con este objetivo -e independientemente de la sentencia sobre estos hechos- extractamos comentarios de los hermanos Grassi.


“No hay que querer que hagan sino hacer que quieran.”

“Educar con razonabilidad a un chico y con mucho amor.
Cuando la autoridad se ejerce desde el amor y no desde el miedo el chico aprende a querer lo que uno le propone.”

Fecha: 25-10-2002
Fuente: América
El Padre Grassi, el tema de la semana 25.10.02
"Televisión Registrada" muestra la detención del mediático sacerdote acusado de abuso deshonesto.

Desde nuestro punto de vista estas citas expresan clara y contundentemente mecanismos de manipulación hacia el otro, otro que queda encerrado en tener que hacer y querer lo que desee la persona que tiene poder / autoridad sobre él.
Y es peor encierro que el encierro que produce el miedo, ya que tiene el disfraz del amor.
Este mecanismo de enseñanza-aprendizaje es un modo de adiestramiento: conlleva un no reconocimiento del otro quien queda sometido al poder, sin capacidad a disentir.


De Juan José Grassi:
“. . . los 3000, 6000, 7000 corazones que están latiendo con el amor de Julio y el amor de Julio está adentro de esos corazones.”

Fecha: 24-10-2002
Fuente: América
Declaraciones del hermano del padre Grassi 24.10.02
El hermano del cuestionado padre Grassi lo defiende ante las cámaras de televisión.

Una vez más se encubre la denuncia -ni más ni menos que de abuso sexual- con el argumento del amor: ¿es por el “amor” que se tiene que aprender “a querer lo que uno (Grassi) le propone”?. Este tipo de mensaje confunde a la opinión pública al desplazar del centro del debate la cuestión planteada: la del abuso sexual.

. . . “me parece (...) horroroso que a alguien se lo acuse de abuso sexual. Me parece, también, que estos cargos de abuso sexual tienen que ser investigados. Yo me ofrezco para que me investiguen totalmente y que la justicia determine lo que tienen que hacer.”

“Realmente el informe de “Telenoche” es un conjunto de personajes reales a excepción del último que no lo conozco.”

Fecha: 24-10-2002
Fuente: América - UOL-Sinectis
El padre Grassi se defiende 24.10.02
El padre Julio César Grassi defendió su inocencia anoche en un canal de televisión

“...darle de comer a un chico es darle de comer a Cristo”

Fecha: 23-10-2002
Fuente: Telenoche Investiga

En relación a estas citas planteamos lo siguiente:

  1. Los pocos elementos se tratan de testimonios concretos y suficientes para abrir una causa.
  2. Sobre “me parece, (...) horroroso que a alguien se lo acuse de abuso sexual” lo único que nos queda comentar es que este tipo de gente tiene estos “lapsus” en algún estado de debilitamiento, como decíamos a ellos también les suele fallar algo de la impunidad de la que gozan, es bueno que cuando se registra algunas de estas fallas no se las olvide y se las almacene en la memoria.
  3. El ofrecerse a investigación llegó hasta la pericia psiquiátrica psicológica. Si bien las personas revemos, reconsideramos nuestros compromisos, Grassi –en los hechos- ha reconsiderado el me “ofrezco para que me investiguen totalmente y que la justicia determine lo que tienen que hacer.” ya que no aceptó las mismas.
  4. Un “conjunto de personajes” Un "conjunto de personajes" ¿no son personas? ¿son personas de ficción?; sumado a que en otro momento son "Cristo" nos preguntamos qué son para Grassi los chicos. Y nos respondemos, pues sabemos que cuando se da este tipo de definiciones y estas incongruencias en las definiciones, la otra persona es desconocida como tal, es -para los abusadores- sólo un objeto manipulable.
Más allá del caso de la familia Grassi opinamos que el abuso sexual (tratado en esta sección como "Abuso sexual") -con sus particularidades y gravedad extremas- es una forma más de sometimiento que va de la mano de la estafa, y en este sentido la estafa económica -con sus particularidades y gravedad extremas- es una forma más de traición que va de la mano con el abuso.

Para terminar, una cuestión de deuda: se debe tener en cuenta -muy especialmente- características de los abusadores como las de "pasar factura" por lo que hacen sentir al abusado en deuda con él. Cuando un niño está haciéndose cargo, apañando y protegiendo a un adulto (sea pariente, vecino, docente y aún hasta padre), cuando alguien se siente tan en deuda con un otro se debe a que está siendo manipulado para sentirse así, quedando por ello en manos del "acreedor", permitiendo, justificando y aún comprendiendo así todo tipo de abuso y atropello que cometa la persona abusadora contra este.

No confiar en gente no creíble, y mucho menos poner en manos de ellos a los hijos. No son confiables los que reiteradamente no pueden sostener sus compromisos, sus afirmaciones.
Sin ningún ánimo de generar "persecutas" por posibles abusos sexuales, es importante discriminar estos signos para acercarse a niños que pudieran estar en alguna de estas situaciones, aún sólo cuando la prevención valga como para incidir en que el chico salga de lugares y situaciones de manipulación, ya que sólo esto es síntoma de salud.