Acerca de algunas técnicas terapéuticas integradoras

Abordajes focalizados en la disminución de la angustia, en conjunto con el trabajo con las causalidades para resolver profundamente

En respuesta a inquietudes del foro ahora voy a referirme sucintamente al enfoque integrador y a la necesidad contar con diferentes técnicas en las terapias. En este caso me estoy remitiendo específicamente a estas preguntas

Es verdad, para resolver los problemas psicológicos se requieren modificaciones personales y no esperar que cambien los padres o familia, no obstante en tanto haya dificultades importantes para despegar y ser autónoma/o hay que “tocar” la familia con todas las técnicas posibles, pues son familias que cuentan con disfunciones vinculares que la persona padeciente sufre desde la infancia y adolescencia.

En tanto el vínculo disfuncional persista y la persona se encuentre involucrada en el mismo se marcha cuesta arriba y en camino empinado en el tratamiento. Por otra parte hay sentidos de vida rígidos que devienen de los sentidos familiares y que derivan, entre otras, en profecías autocumplidoras y no dejan avanzar, sentidos de vida que son personales y exclusivos, hay que descubrir el propio.

Es ocuparnos de la familia en las terapias individuales sin apuntar a que modifiquen, en tal caso lo hacen por efecto de las evoluciones terapéuticas de la persona en tratamiento, la familia reacciona ante los cambios de un miembro reacomodándose, de antemano no sabemos cueles van a ser estas reacciones; es una consecuencia forzosa, si una persona, especialmente las sintomáticas, se corre de “su-puesto” fuerza a un reordenamiento general. En las familias rígidas no se admite que alguien salga del lugar asignando y tomado, puede ser un lugar de miembro problemático, o exitoso, o dependiente, u obediente, o salvador, o etc.

En caso de ser indicadas y posibles terapia o entrevistas familiares es una modalidad privilegiada para lograr las modificaciones necesarias. En este caso citamos a la familia a fin de que favorezca la psicoterapia individual, si además hay un corrimiento saludable de uno o más miembros de la misma: magnífico, es lo que suele suceder cuando se toman las entrevistas familiares en función de que la persona asistida llegue a otro equilibrio superador con su familia. En estos momentos históricos nos encontramos a menudo con adultos jóvenes, hasta de 30 o más años, que no pueden despegar, por lo cual estamos indicando esta modalidad en edades que en años anteriores era dable.

En caso de no ser posibles las entrevistas familiares, por ejemplo por que el paciente no quiere o su familia está lejos, se trabaja a nivel individual estos vínculos familiares dependientes, con la investigación conjunta acerca de la comunicación, con la historia, con los consecuentes sentidos de vida impuestos y asumidos como propios, con las resultantes profecías autocumplidoras, etc.

Ergo, si bien no es indicado esperar que la familia o algún miembro de la misma cambie para poder a abrirse camino, es necesario trabajar y a fondo con estos vínculos, privilegiando que sea en forma conjunta en función de sanearlos lo más posible, en caso de no poder convocarlos se hace en forma individual; en ambos caso el objetivo final es posibilitar el despegue de la persona asistida a fin de que pueda tomar las riendas de su vida.

Cualquiera sea la reacción familiar en general conllevan un boicot a la psicoterapia, en este caso lo detectamos y decimos con la persona asistida: “ladran Sancho”, viendo en conjunto de que se trata para que nos sirva más a la comprensión y ver que caminos se toman para avanzar en el sentido que se viene trabajando y para desactivar el boicot.

Aspectos que hacen a esta problemática se adquieren desde el nacimiento, no se te pegan, los asimilás como propio, pasan a formar parte de uno mismo, por eso digo que la evolución pasa esencialmente por cambios internos. Aspectos que son personales y altamente insalubres llevan a no poder encontrar el camino propio. Sucede que a la hora de pasar por síntomas tan dolorosos te das cuenta que esto no va con vos, que hace falta cambiar radicalmente y allí vas encontrando estas características de sometimiento a imposiciones y etc., cuando te das cuenta los desconoces como propio ya que has tomado en tu vida un camino hacia la libertar, esta necesidad de ser dueño de vos mismo es lo tuyo, lo otro que se viene adquiriendo de antaño y estaba molestando invisiblemente se hace visible -¡por suerte!- con estos síntomas y entonces es hora de trabajar hacia las modificaciones que venimos hablando.

Sí señor, se puede superar la enajenamiento que deriva en estas características, como ser dudar de la propia identidad o vivir pendiente del consenso externo.

No vamos a pretender fabricar personas perfectas, es imposible, sabemos que van a seguir con características atinentes al tipo de personalidad con que vinieron al tratamiento. Se trata de lograr modificaciones a fin de que cuando haya debilitamientos por alguna crisis los síntomas no dominen a la persona, en este tipo de personalidad en algún momento puede cruzarse alguna idea absurda por la cabeza y dudar acerca de su realidad, en este sentido el objetivo terapéutico es que prontamente se puedan descartar las dudas ilógicas, sin entrar a embrollarse la vida, que el dudar sin sentido lleve a darse cuenta de lo absurdo antes de que comience la gran columna negra. Para ello es imprescindible (además de lo señalado anteriormente) el fortalecimiento de las siguientes Cualidades Básicas de la Personalidad: Flexibilidad, Identidad y Discernimiento.

Ideas sobre el que hacer con los síntomas ya lo escribí en artículos, esto se trabaja en la psicoterapia, pues depende también de cada uno y de las circunstancias; no olvidemos que la terapia también debe integrar las esferas afectivas, conductuales, cognitivas y volitivas (voluntad), bajo estas premisas se llega a un acuerdo con el paciente a fin de que pueda realizar determinadas conductas en combinación con las otras esferas. Es imprescindible que se tomen estas técnicas para disminuir el sufrimiento, esto permite trabajar más profundamente y evitar los psicofármacos con todos sus riesgos.

Si se plantea la salida de esto como lucha se cae en un contrasentido contraproducente, pues sería luchar contra uno mismo. No hay que luchar contra nada, hay que trabajar con uno mismo, para cambiar los aspectos insalubres que llevan a sufrimientos, disminución de las capacidades y paralización. Por lo tanto es mejor darse ánimo con consignas tales como adelante, a trabajar con todo, ¡sigamos en la búsqueda de uno mismo!, etc. Cada uno encontrará una frase de estímulo para seguir buscando las riendas de la propia vida y tomarlas definitivamente.

Encontrar una psicoterapia que pueda integrar el conjunto de los aspectos humanos no es sencillo, por una parte 1, 2, 3 o más pueden no marchar adecuadamente o de entrada hay desajustes como “tenés que asumirte”, entonces hay que cambiar tantas veces como sea necesario; también sucede que la psicoterapia venga bien, vaya dando en la tecla en varias cuestiones y llega a un punto donde ya se ve agotada, donde se estanca y no produce más evolución, es común que pase cuando el terapeuta es idóneo en el trabajo con algunos de los aspectos y no cuenta con recursos para tomar los restantes, en tanto pase un buen tiempo y no cedan los síntomas más angustiantes o no se tomen áreas fundamentales es lícito dar por acabada esa etapa terapéutica, en estos casos se puede acudir a Psicología Integradora, otra alternativa puede ser ver desde que marco trabaja ese terapeuta para que el cambio sea hacia un profesional que pueda tomar los aspectos que quedaron relegados.

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Lic. Marta Chiarelli, psicóloga
M.N. 8632
Psicología Integradora
Capital de Argentina
Tel. 4632-0441
Horario de secretaría: 16 a 20
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