Instituciones psicopáticas

De las instituciones psicopáticas
a la enfermedad mental

 

3º CONGRESO INTERNACIONAL DE
SALUD MENTAL Y DERECHOS HUMANOS

Universidad Popular Madres de Plaza de Mayo
Buenos Aires 14/11/04
Seminario. Área: Psicología.
Eje: Las instituciones y sus devenires.
Autores:
-
Lic. Marta Chiarelli, psicóloga
- Lic. Mariano Guerschman, psicólogo
- Dra. Silvia Makler, abogada,  psicóloga social
- Lic. Marina Yver, psicóloga


Objetivos:
La temática principal consiste en plantear los puntos de conexión entre las características psicopáticas de las instituciones -desde las macroinstituciones, pasando por las instituciones de salud mental, hasta la familia- con las enfermedades psicológicas/psiquiátricas.
Revisar el quantum que de dichos rasgos poseen las instituciones que integramos y cuáles son sus devenires.
Vemos como conclusión que un complicado entramado de lealtades y traiciones atrapan a instituciones y personas en un enfermo laberinto sin salida. Se nos impone, por lo tanto, el trabajo en y con las instituciones libres y autónomas.

Estructura y dinámica de la familia como institución social

Las concepciones sobre la etiopatogenia sociocultural de las enfermedades mentales conllevan distintos devenires institucionales y terapéuticos. Aunque en algún momento se pueda demostrar fehacientemente causalidades orgánicas, hasta que no se demuestre lo contrario, sostenemos que la formación sociocultural tiene una gravitación necesaria para que se produzcan.

Las instituciones son formas y estructuras plasmadas a través de las praxis sociales en el transcurso de la historia humana. Están condicionadas por el sistema socioeconómico imperante. Determinadas por las relaciones sociales forman la trama social que unen a las personas. Interpenetradas por la cultura generan a su vez nuevas culturas.

La institución cultural básica es la familia, célula social que reproduce la cultura dominante. Lo hacen de forma particular de acuerdo a su propia idiosincrasia. Estamos definiendo como familias más patogenizantes a las que reproducen más fielmente el eje dominador-dominado: las familias psicopáticas.

Psicopatía y su complemento

Diferenciando el “Trastorno Antisocial de la Personalidad” y “Personalidades Psicopáticas”, nos vamos a referir en nuestro trabajo a esta última. Psicopatía y rasgos psicopáticos que van por los carriles de “lo socialmente correcto”.

Consideramos la Personalidad Psicopática como un cuadro en el que coexisten enfermedad y códigos éticos-morales perversos.
Algunos de sus signos:

  • Egocentrismo absoluto.
  • Cosificación de las personas.
  • Déficit en la capacidad de apuntalamiento.
  • Seducción.
  • Mentira.
  • Satisfacer gozosamente al otro.
  • Adulación.
  • Desprecio y violación de los derechos de los demás.
  • Deshonestidad.
  • Estafa encubierta.
  • Irritabilidad,  agresividad e impulsividad, la más de las veces reprimida.
  • Deficiente planificación del futuro.
  • Despreocupación imprudente por su seguridad o la de los demás.
  • Irresponsabilidad selectiva.
  • Ausencia de angustia,  remordimientos o sentimientos de culpa.

 
El psicópata busca su equilibrio en un otro complementario.
Ellos suelen ser depresivos, psicópatas encubiertos  y/o con Objetivos de Vida tales como “vivir sufriendo”, “la búsqueda de la angustia”, “penar, penar y penar”.

El contrato fundacional inconsciente de una pareja, fija en gran medida las características de cualquier familia. Cuando ellas son psicopáticas devienen  enfermedades graves, en especial de los hijos.

Entidades gnoseológicas afectadas

De acuerdo al quantum y potencia de los rasgos psicopáticos en la pareja parental mayor será el daño producido en los hijos.

Decimos que generan todo tipo de enfermedad exceptuando las causadas por efectos fisiológicos directos de la enfermedad médica.

En parejas psicópatas, en cuanto a lo investigado hasta el momento por nosotros, vemos la esquizofrenia como la patología que más recurrencia tiene.
Desde un abordaje teórico esto es explicable por las consecuencias de despersonalización, disociación, escisión, pérdida de sentido de realidad... que estos tipos de relacionamientos traen aparejados de acuerdo a sus signos y patrones de comunicación. Desde un abordaje fáctico, la clínica.

Algunos patrones de comunicación

  • Partiendo del paradigma de la imposibilidad de no comunicarse vamos a referirnos a una de las modalidades más patógenas de la manipulación: la desconfirmación, mediante la cual la persona hace como si el otro no existiese, llevando esto a la pérdida de la identidad, esto está claro: es psicotizante.
  •  El poderío psicopático se mantiene en gran medida gracias a los secretos a voces. El secreto como forma de generar y mantener el poder cuando toma estas características es, además, una confabulación que requiere lealtad.
  •  Obús patogenizante son  golpes, mazazos, que vienen de golpe y dan golpes tan certeros como cualquier cañón de artillería bien manejado.
  •  Diferenciando las paradojas de las contradicciones vemos que aquellas son las que paralizan, confunden y/o angustian dejando a las personas a merced.
  •  El gatopardismo son maniobras que trastocan la realidad ilusionando de un cambio que no existe. El engaño consiste en hacer creer que se ha cambiado lo requerido, cuando en realidad se cambia algo para que nada cambie.

 

De padres a hijos

De las manipulaciones más ingenuas, pasando por las manipulaciones psicopáticas, a Personalidades Psicopáticas son las distintas gamas posibles que podemos encontrar en estas figuras parentales.

Las parejas se constituyen mediante el contrato fundacional, en ellos se negocian los Sentidos de la Vida.
Se produce un “crossing-over” de los contenidos conscientes e inconscientes de cada uno. Cuanto más conocido y hablado es, más saludable resulta ser la familia que forman.
El Sentido de la Familia psicopática es una máscara de cordura, libertad, honestidad..., con una realidad encubierta o inconsciente de tenor totalmente opuesto. Contrato explícito y careta son diametralmente opuestos a los contratos inconscientes.
Los hijos van construyendo un Sentido de la Vida signado autoritariamente y en bloque, en donde no hay discernimiento de una escala de valores.

Sus componentes:

  • Motivos
  • Guiones
  • Mitos y Dogmas

Se van formando rígidamente en la defensa de un excesivo predominio de lo ya pautado en contraposición de todo lo que puede generarse como novedoso. Alienación que niega el devenir histórico y la apertura de la familia, son signos típicos.

La educación está basada  en coartar, limitar, empobrecer, malformar, deformar capacidades personales como:

  • Integración de todo tipo
  • Flexibilidad
  • Creatividad
  • Cualidades Básicas de la Personalidad:  Identidad
    • Individuación
    • Discernimiento
    • Integración.
  •  La Continuidad histórica personal: pasado-presente-proyecto 
  • Contenidos Inconscientes Directos.

Lealtades y traiciones

Toda institución requiere lealtad a sus principios básicos, traicionarlos conlleva a dejar de pertenecer a la misma. La identidad personal se adecua o no las pautas esenciales de cada institución por.

Las instituciones que mejor representan la cultura arbitraria y antihumana instituida desde el poder socioeconómico se rigen esencialmente por valores adversos a los naturales, por funcionamientos patogenizantes, por condicionar en su totalidad a sus miembros.
Encierran a las personas en la paradoja en que tanto la traición como la lealtad cuestan la salud, la dignidad, la integridad.

En la institución familia, además, es el concreto peligro de muerte física o psicológica  tanto en la traición como en la lealtad de todos sus códigos y normas.  Cualquier desvío es considerado de alta traición; siendo la mayor lealtad el compromiso con la enfermedad tanto grupal como de algunos de sus miembros, llegando hasta el compromiso con la propia y grave enfermedad mental.

La enfermedad deviniente suele emerger, generalmente, en momentos en que la mayor traición es posible: la autonomía, produciendo así la obturación del movimiento libre de todos sus miembros.

Productos producidos e improductivos

Parejas parentales de este tipo esperan una buena “producción”, motivos de la vida y de la pareja son la exhibición, el lucimiento. En realidad producen buen nivel y máxima calidad de hijos, y también productos improductivos. Aunque improductivos para el lucimiento son hijos productivos para objetivos tales como asegurar el equilibrio de sojuzgamiento.
A través de la relativa distonía con los síntomas, el conjunto familiar logra la reproducción y sostenimiento de los mismos. Y así siguen estas historias en una constante espiral hacia cada vez mayor patología.

Tratamientos

El tratamiento integrador significa, básicamente, la posibilidad de contar con metodologías y herramientas que puedan integrar todos los aspectos y todos los tiempos históricos (pasado-presente-proyecto) del ser biopsicosocial, atendiendo/entendiendo al ser único como persona.

Mientras el devenir de las instituciones de salud mental siga siendo el sometimiento a leyes, conocimientos y funcionamiento que operan a favor del poder dominante, es falso hablar de psicoterapia.

Nuevas instituciones organizadas emancipadamente de la cultura dominante que enferma van dando paso a nuevas teorías, se podría decir a una nueva cultura en la que la posición del profesional va tiñéndose cada vez más de las verdaderas necesidades de salud.

Seguir el trabajo con ellas y armar nuevas instituciones de asistencia, docencia e investigación, autónomas, formadas por equipos interdisciplinarios, que puedan analizar constantemente la coherencia entre discurso y práctica es el camino que consideramos puede a dar un salto hacia nuevos paradigmas en salud mental; los cambios sociales los requieren.     
 

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