Obsesión con la homosexualidad

Cordiales saludos de antemano y felicitación para los creadores del blog.
El tema que quiero tratar es un tema que ya he visto que les sucede a muchos también, yo soy uno más:
Soy un varón de 23 años y ya desde pequeño me he sentido atraído por chicas. Jamás tuve duda de ello, tuve un amor de infancia (esa chica a la que siempre mirabas, siempre tuviste ganas de besar, siempre pensabas en ella), tuve un amor de adolescencia (el primer amor verdadero, ese que jamás olvidaré) y a partir de esa edad he tenido varios amoríos más, siempre con chicas. El problema surgió cuando tenía 19 años, cuando empecé a salir con una chica. Un día nos duchamos juntos y, por timidez (no había tenido relaciones sexuales previamente, no con penetración), hice todos los esfuerzos por no tener una erección. Pocos días después, por teléfono, ella me dijo que estaba preocupada porque no hubiera tenido la erección ese día, y se planteó la posibilidad de que fuera gay. Fue una idea que me pareció absurda en el momento, pero al paso del tiempo se fue expandiendo, era como un insecto que tenía en la cabeza y que poco a poco iba creciendo, hasta llegar al extremo de plantearme si era o no era homosexual. Desde ese día he pasado calvarios: sentir cosquilleos en la barriga al ver a hombres (eso es lo que más me perturba), tener como un impulso de besarlos cuando se me antoja algo totalmente ajeno a mi. Pero, si se me antoja algo ajeno, ¿Por qué tengo ese cosquilleo en la barriga, por qué este impulso? Quiero ser yo el que decida qué me gusta y no me gusta, no mi mente. Yo quiero estar con chicas, besarlas, amarlas, pero mi mente es como que quiere jugar conmigo, acribillándome a preguntas absurdas, forzándome a imaginar cómo sería una relación sexual con un hombre, provocándome destellos que, aunque no se me hacen asquerosos, me incomodan y me hacen pensar que tomaré un camino, una rama, que para nada quiero ni pisar.
¿Por qué no puedo vivir una vida tranquilo, con una atracción hacia las chicas, sin esos impulsos, sin esos cosquilleos, sin esos pensamientos que me dejan completamente incómodo? La verdad es que esa obsesión va a rachas, unas veces la siento más, otras la siento menos. Cuando la obsesión se mitiga, me siento un personaje tranquilo, natural, que sigue el curso de su vida. Pero cuando la obsesión vuelve, me desespera.
También sea dicho que siempre he sido una persona bastante hipocondríaca (hubo una época que creía que tenía varios cánceres, siempre encontraba algún tipo de cáncer con el que obsesionarme), y, después de varias reflexiones, he pensado que quizás veo la homosexualidad como una enfermedad más, y que mi mente me obliga a pensar que lo soy cuando no lo soy.
Ver la palabra gay escrita en algún sitio, ver a homosexuales por la calle (no tengo nada contra ellos en absoluto, que quede claro), todo ese tipo de cosas alimentan mi obsesión, y me cabrea y da miedo la posibilidad de que nunca pueda desaparecer esa obsesión, cuando es lo que más deseo en este mundo.
Diablos, ¿Cuando podré salir de esta maldita prisión, que tantas veces me perturba e incomoda?

Gracias por vuestra atención, y espero que me ayuden en cuanto les sea posible.